Destacan su papel en la seguridad alimentaria y el desarrollo sostenible del campo
Toluca, Estado de México, 26 de febrero de 2025. En el marco del Día del Agrónomo, la Facultad de Ciencias Agrícolas de la Universidad Autónoma del Estado de México (UAEMéx) llevó a cabo una ceremonia de reconocimiento a tres académicos destacados y premió a las empresas Aspros y Prosema por su rendimiento en la Plataforma de Transferencia de Tecnología.
El director de la Facultad, Gaspar Estrada Campuzano, resaltó la importancia del trabajo de los ingenieros agrónomos en la producción sostenible de alimentos. “Nuestra labor es garantizar la seguridad alimentaria con prácticas que respeten el medio ambiente, incrementen los rendimientos y reduzcan la vulnerabilidad de los sistemas productivos”, afirmó.
La conmemoración contó con la presencia de la titular de la Secretaría del Campo del Estado de México, María Eugenia Rojano Valdés, quien destacó que los agrónomos son fundamentales para el desarrollo económico y social del país. “Es necesario revalorar esta profesión, ya que sin su trabajo no podríamos avanzar hacia la soberanía alimentaria”, señaló.
A su vez, la diputada federal Azucena Huerta Romero, invitada al evento, subrayó la importancia de fortalecer a los pequeños productores e impulsar la aplicación de nuevas tecnologías en el sector agrícola.
Retos y futuro del campo mexicano
Durante su intervención, Estrada Campuzano advirtió que, pese a la riqueza en biodiversidad de México, el país enfrenta importantes desafíos en materia de seguridad alimentaria. “Si bien nos hemos consolidado como un actor clave en el comercio agroalimentario internacional, seguimos dependiendo de la importación de grandes volúmenes de maíz, trigo, frijol y arroz, lo que nos hace vulnerables ante la volatilidad de los mercados globales”, explicó.
En este sentido, enfatizó la necesidad de equilibrar la tradición con la modernidad, promoviendo la conservación de variedades de maíz nativo y la adopción de prácticas agroecológicas, al tiempo que se impulsa la innovación tecnológica en regiones de alta productividad.
Finalmente, Estrada Campuzano reafirmó que ser ingeniero agrónomo es más que una profesión, es una vocación al servicio del campo y la sociedad. “México nos necesita. Nuestro deber es innovar, proteger los recursos naturales y garantizar un sistema agroalimentario más justo, productivo y sostenible para las futuras generaciones”, concluyó.
