domingo 10 de noviembre de 2024
Edición 401
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Durante la celebración de su Centenario Abrió la OIT las puertas al Futuro laboral: David Parra

 

 

Valle de México.- Con la adopción de un convenio y una recomendación para combatir la violencia y el acoso en los lugares de trabajo, finalizó, en Ginebra Suiza, la 108ª edición de la Conferencia de la Organización Internacional del Trabajo (OIT). Definidos como un comportamiento que puede producir «daño físico, psicológico, sexual o económico», el convenio señala que la violencia y el acoso también se consideran «una amenaza para la igualdad de oportunidades”

Informó lo anterior David Parra Sánchez, asesor general de la Confederación de Servidores Públicos de los Poderes de los Estados, Municipios e Instituciones Descentralizadas de la República Mexicana (Confepider), luego de destacar que “el propósito de esta nueva norma internacional es proteger a los trabajadores, independientemente de su situación contractual”, dijo.

Parra Sánchez recordó que una vez aprobado el convenio, el director general de la Organización Internacional del Trabajo, Guy Ryder, destacó  que “la siguiente etapa consistirá en la aplicación de esas medidas de protección, con el objetivo de fomentar un entorno laboral mejor, más seguro y decente para mujeres y hombres”.

El también asesor general del Sindicato Único de Trabajadores del Estado y sus Municipios (SUTEyM), agradeció y reconoció la invitación al centenario de la OIT a través de la Confederación Latinoamericana y del Caribe de Trabajadores Estatales (CLATE) que encabeza  Julio Fuentes.

Por otra parte, David Parra, destacó la importancia de la declaración del Centenario, que se aprobara el pasado viernes, de la que dijo marca “una oportunidad histórica para abrir una puerta a un futuro mejor para los trabajadores de todo el mundo” y añadió que “establece las bases para cumplir el mandato de la OIT en su segundo siglo”.

Finalmente, el asesor general de la  CONFEPIDER destacó que “del Centenario es mucho más que una declaración de deseos o intenciones. Propone un cambio en el paradigma de cómo vemos el desarrollo. El bienestar de las personas debe estar en el centro de las políticas económicas y sociales, y debemos prestar especial atención a los que han quedado más rezagados”, destacó.

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