Texcoco, Méx.– El pasado 8 de marzo, en el marco del Día Internacional de la Mujer, estudiantes y académicas de la Universidad Autónoma de Chapingo (UACh) se unieron a la marcha en el centro de Texcoco para denunciar casos de acoso, hostigamiento, violación y feminicidios. Entre las consignas que resonaron durante la manifestación se escuchó el clamor por justicia y seguridad para todas las mujeres, así como el rechazo a la impunidad que rodea muchos de estos casos.
Bajo el sol ardiente, las mujeres expresaron su indignación y exigieron que se ponga fin al acoso y la violencia de género en la institución. Una estudiante identificada como Nely, del programa de robótica de la UACh, relató su experiencia de acoso y desafió a su agresor a enfrentar las consecuencias de sus acciones. También demandó protección para su familia y pidió que se detenga el hostigamiento en su contra.
La marcha contó con la participación de diversas organizaciones y grupos, incluyendo madres buscadoras de personas desaparecidas, mujeres que denuncian a deudores alimentarios y miembros de la comunidad LGBTTIQ+. Todos unidos en un reclamo común: el derecho a vivir libres de violencia y discriminación.
Las denuncias más fuertes se dirigieron hacia la Universidad Autónoma de Chapingo, donde se señaló la prevalencia del acoso sexual que afecta a un gran número de estudiantes, muchas de las cuales abandonan sus estudios debido a estas situaciones. La maestra María de Lourdes Rodríguez Ramírez, Secretaria de Asuntos Laborales del Sindicato de Trabajadores Académicos de la UACh (STAUCH), destacó la importancia de luchar por los derechos de las mujeres y anunció acciones legales para combatir el acoso y la impunidad en la institución.
Además, se hizo hincapié en la denuncia contra el rector Ángel Garduño García, quien enfrenta acusaciones penales por presunto abuso sexual contra una estudiante de la institución. A pesar de estas acusaciones, no se han registrado avances significativos en la investigación ni se ha hecho justicia en el caso, lo que ha generado indignación y desconfianza entre la comunidad universitaria.
Entre los testimonios de agresión sexual, se escucharon voces de solidaridad y apoyo mutuo, así como la exigencia de que se haga justicia. La protesta, que transcurrió en orden y con la participación activa de la ciudadanía, dejó en claro que la lucha por la igualdad de género y el respeto a los derechos de las mujeres sigue siendo una prioridad en la agenda social y política.
A pesar de los avances en la concientización sobre la violencia de género, aún queda mucho por hacer para erradicar este flagelo y garantizar un entorno seguro y justo para todas las mujeres. La protesta del 8M en Texcoco fue un recordatorio poderoso de la urgencia de actuar y de la necesidad de que las autoridades tomen medidas concretas para proteger y empoderar a las mujeres en todas las esferas de la sociedad.
8M: PROTESTAN UNIVERSITARIAS DE CHAPINGO, DEMANDAN JUSTICIA Y SEGURIDAD
