Con el propósito de fomentar la difusión del conocimiento biológico, el Museo de Historia Natural “Manuel M. Villada” de la Universidad Autónoma del Estado de México (UAEMéx) exhibe diversas colecciones biológicas y piezas taxidérmicas. Entre las más destacadas se encuentran la muestra de arácnidos y un ejemplar de mono araña, las cuales también pueden ser apreciadas a través de la Mediateca Digital disponible en la página web institucional.
Gretta Reyes Anzaldo y Emmanuel Tenorio Sánchez, egresados de la Facultad de Ciencias de la UAEMéx que colaboran en este espacio universitario, explicaron que la riqueza cultural de la exhibición museística radica en que muchas de las piezas fueron material didáctico para la comunidad estudiantil del antiguo Instituto Científico Literario, hoy UAEMéx.
El ejemplar de mono araña es un espécimen joven, identificado por su tamaño. Posee un pulgar vestigial poco desarrollado, lo que le da menor capacidad de movimiento en comparación con otros primates. Su cola, sin embargo, funciona como una extremidad adicional de agarre, explicó Reyes Anzaldo. A pesar de la incertidumbre sobre la procedencia de esta pieza, su exhibición es crucial, ya que el mono araña es una especie en peligro de extinción según la Norma Oficial Mexicana 059-2010, debido al desplazamiento de su hábitat por la intervención humana y a sus limitadas condiciones reproductivas, ya que solo tienen una cría por año.
Reyes Anzaldo añadió que durante los recorridos presenciales en el museo se visibiliza la situación actual del mono araña y otras especies amenazadas.
La colección de arácnidos, contenida en una caja entomológica, muestra diversas especies de arañas expuestas y montadas en seco mediante un procedimiento de desecación artificial que facilita su observación. Emmanuel Tenorio Sánchez, especialista en biología, describió que la anatomía de las arañas se divide en dos partes: el prosoma, que contiene las patas y los pedipalpos, estructuras clave para la alimentación y reproducción, y el opistosoma, donde se producen los hilos de seda para construir telarañas.
Tenorio Sánchez destacó que las arañas están distribuidas en todos los ecosistemas terrestres y se alimentan de una variedad de insectos, desempeñando un papel crucial como depredadores naturales de plagas y vectores de enfermedades. “Al exhibir estos ejemplares al público, contribuimos a la difusión del conocimiento biológico. En los recorridos y visitas guiadas con grupos escolares, destacamos la importancia de estos organismos en el equilibrio ecológico,” comentó.
Este esfuerzo del Museo de Historia Natural de la UAEMéx demuestra su compromiso con la educación y la conservación, ofreciendo una valiosa oportunidad para que el público aprenda sobre la biodiversidad y los desafíos que enfrentan diversas especies.