“Imagina llegar al día de tu jubilación y que el dinero que aportaste durante toda tu vida laboral como policía te lo nieguen, que aunque por ley te corresponde recibir el pago de tu pensión, pasen meses e incluso años sin que recibas ni un solo peso, porque a la Caja de Previsión de la Policía Preventiva (Caprepol) de la Ciudad de México no le da la gana cumplir con su deber y prefiere dejar a su suerte a miles de pensionados”, relata mi entrevistado.
Pero qué tal el jueves pasado que la regenta estaba feliz como lombriz, tras ver cómo su Policía, comandada por el secretario Omar García Harfuch, con un gran operativo y limpiamente, logró retirar al mismo tiempo todos los bloqueos de los transportistas que estaban estrangulando a la CDMX.
Lo que ustedes NO saben es que..
Desde hace dos años la falta de cumplimiento y desempeño de la Caprepol ha afectado tanto administrativa como financieramente a cerca de 40 mil elementos en activo, 35 mil pensionados, así como a las viudas de expolicías, a quienes dejaron sin pensiones, préstamos de tipo hipotecarios, especiales y a corto plazo, entre otras prestaciones.
Tras ver la nota que había publicado un medio sobre el tema, me buscó el Frente Unido por la Defensa de Caprepol, quien denunció que el robo que se está cometiendo desde la caja asciende a cerca de 20 mil millones de pesos. ¿Dónde está ese dinero que provine de aportaciones de la Policía Bancaria, la Policía Preventiva y de los Bomberos? Sí, leyó bien, 20 mil millones de pesos.
“Esta caja, durante los treinta y tantos años de servicio que estuvimos funcionó bastante bien, tenía una serie de prestaciones que ya no se tienen”, explicó.
También se han visto afectadas las viudas e hijos de los policías que fallecieron y que ya llevan más de un año sin poder cobrar el pago de pensión.
El dinero robado NO sale del.
PRESUPUESTO…
“Durante todo ese tiempo de vida laboral, compañeros cotizaron; la pensión no nos la dan del Presupuesto que se forma con el impuesto de todos los ciudadanos, nos la dan con el fondo que generamos nosotros. Ahí debe estar el dinero”, señaló.
Sin embargo, la gota que derramó el vaso fue que los préstamos a corto plazo (que también afecta a elementos en activo) que se contemplan en la ley y el reglamento de la caja, de un día para otro pasaron a sorteo debido a la “alta demanda”.
“Ahora te dan un boleto para participar en el sorteo; si salgo premiado me dan el préstamo, si no salgo premiado no me lo dan, aunque de acuerdo con la ley tengo derecho a éste”, indicó.
A partir de que directivos decidieron dejar al azar las prestaciones de los policías, comenzaron a crecer las movilizaciones por la vía legal a través de amparos e, incluso, los pensionados han formado distintos grupos para hacerle frente a la indiferencia de las autoridades.
Sin ganas de auditar
El mal funcionamiento de la caja es un secreto a voces. Tan sólo durante la legislatura pasada en el Congreso de la Ciudad de México se solicitó, mediante un punto de acuerdo, que se llevara a cabo una auditoría para revisar su cumplimiento y desempeño, la cual hasta la fecha no se ha hecho.
“Solicitamos a la actual legislatura, que preside Héctor Díaz Polanco, retomar el punto de acuerdo que dejó la anterior legislatura. Ya hicimos el documento legal, lo entregamos al Congreso, pero nos encontramos con la novedad de que todas las comisiones tienen meses que no sesionan y sí cobran”, acusó.
Incluso, ya se cumplieron los 60 días que una autoridad tiene para responder cualquier petición, por lo que el siguiente paso es buscar que, mediante un amparo, se retome la solicitud y se lleve a cabo la auditoría a la caja de ahorros.
“Simplemente de las puras aportaciones de los compañeros que todavía están en activo al año son 170 millones de pesos los que se cotizan”, detalló.