Agenda mínima para recuperar México
Por: Pepe Cureño
Una tormenta se avecina en el horizonte y solamente estamos esperando a que los rayos y la granizada no nos alcancen, actuando desde la conformidad de nuestro sillón y pensando que con compartir memes y firmando peticiones en Change.Org vamos a detener la fuerza de esta implacable tempestad que amenaza con borrar de la faz de nuestra nación todo intento de oposición a un gobierno que tenue y selectivamente privilegia la descalificación, la división y la represión a sus adversarios políticos.
No debemos ser tan ingenuos e ignorar que este vendaval tiene la fuerza inconmensurable que le dio el gran margen de legitimidad electoral otorgado en el 2018, aquel huracán se desvanece por la pifias presidenciales y de sus secuaces, que escudados bajo la bandera de la honestidad padecen cada vez más con frecuencia el verse ennegrecida esta supuesta “honestidad valiente” por un pasado turbio y por la corrupción que sigue siendo un lastre que azota todo nuestro régimen político y que obviamente las y los guindas no están exentos de ello.
Sin embargo, no todo está acabado, todavía hay esperanza para nuestra generación y no me refiero a aquella que encumbra en su slogan un movimiento político sino a la posibilidad efectiva de creer en algo mejor, pero esta esperanza deberá emanar de las y los ciudadanos de buena fe con ganas de construir una patria mejor para todas y todos, no obstante lo mencionado, no solo se trata de una cadena buenas intenciones, hay que empezar a trabajar para logarlo a la brevedad posible, pero ¿por dónde iniciar una tarea de dimensiones titánicas?
Yo sugiero comenzar esta labor con una tarea minúscula en apariencia empero mayúscula en esencia, que es buscar una alianza multipartidista basada en una agenda mínima política, es decir, no una coalición electorera que pasada la elección reparta el botín entre sus correligionarios pero no genera buenos dividendos entre las y los ciudadanos; Sino un proyecto de gobierno de coalición real que en sus entrañas aglutine diversas causas y demandas sociales que con base en una figura política con reputación intachable haga frente a las huestes populistas y los miles de programas sociales de ya sabes quién.
Aquí no hay espacio para la simulación y las ocurrencias, es tiempo de hacer real politik basados en las ciencias sociales y la técnica, no cabrán los oportunistas ni los zalameros ni mucho menos las y los JRs que su mayor talento es portar en muchas ocasiones un apellido que les queda grande, con esto no estoy descartando a nadie en específico, pero las elecciones se ganan convenciendo a la ciudadanía y que este convencimiento se transforme en votos. El camino es largo y sinuoso, hay que apresurar el paso para llegar a tiempo a la meta, la construcción de esta agenda será vital para llegar a consensos claros que permitan construir alianzas clave para aspirar a ganar, ya tenemos una tarea, comencemos hoy mismo a edificar nuestra victoria.
¡Nos leemos pronto!
