Edición 384
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Coordinación, fuerza y explosividad: fundamentales en el boxeo, dice Carmita de los Ángeles Herrera López

Carmita de los Ángeles Herrera López, estudiante de la Facultad de Derecho de la Universidad Autónoma del Estado de México (UAEMéx), obtuvo la medalla de plata en la Universiada Nacional Aguascalientes 2024. En una reciente entrevista en Facebook, admitió que esta ha sido una de las competencias más exigentes de su carrera deportiva.

«Estuve trabajando muy duro durante un año. La meta de esta temporada era llegar a la final, y todo el esfuerzo se refleja en esta medalla. Me siento feliz por el resultado», expresó la estudiante de octavo semestre de Derecho.

Herrera López comenzó su camino en el boxeo a los 17 años, y su constancia la ha llevado al éxito. «Me representa más la constancia, no solo en el boxeo, sino en la vida. Combinar mis estudios y el deporte ha sido un desafío, pero algo dentro de mí me motiva a ser constante en todas mis actividades para lograr mis metas», puntualizó la medallista.

El boxeo y la carrera de Derecho forman una combinación perfecta para Carmita, ya que ambos requieren tácticas de combate. “Es importante tener una estrategia para alcanzar los resultados”, subrayó.

Carmita recuerda que comenzó en el deporte practicando karate a los siete años, y luego básquetbol. Participar en la Copa Estado de México 2022, donde logró un subcampeonato, y en la Universiada 2023 en Sonora, donde ganó una medalla de bronce, han sido retos importantes que han forjado su carrera y le han permitido crecer como deportista.

El equipo que ha formado con su entrenador, Simón Reyes, ha sido clave para su mejora en el pugilismo. «Es un deporte donde trabajas la coordinación, la fuerza y la explosividad. Tienes que ver cómo tu cuerpo te permite avanzar”, señaló la universitaria.

Valores como la honestidad, la perseverancia, la disciplina, la lealtad y la constancia son fundamentales para desarrollarse tanto en el ring como en el ámbito profesional. Herrera López busca motivar a las siguientes generaciones a trabajar por sus sueños, y concluye que a veces el miedo bien controlado puede ser una herramienta para alcanzar las metas.

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