Aguas Internacionales
Pepe Cureño
¿Cuántas veces hemos despertado con ganas de morir? Ya sea por una gran decepción amorosa, un problema mayúsculo, una traición inesperada o por una terrible enfermedad… no sé el número exacto con certeza, pero lo que sí conozco es que es una sensación sofocante cuando se tiene, cuando se abandona todo recoveco de esperanza y nos embarga la frustración, el dolor o la tristeza en el corazón y el alma; Ahora este tiempo de encierro forzoso nos enseña de forma didáctica y cruel que a pesar de todolo malo de este universo, la vida sigue, ¡aún existeesperanza camaradas!.
Aunque lúgubre mi introducción, presiento que la humanidad del siglo XXI va a ser otra después de haber sobrevivido al Covid-19, ignoro si para bien o para mal, pero de que algo enorme va a suceder es inevitable, va a tener que cambiar drásticamentenuestra forma de organizarnos, no por deseo personal, sino por una imperiosa necesidad de adaptación (casi) instintiva a algo sin precedentes; Espero el índice de mortalidad referente al maldito virus disminuya con el avance de las semanas, porque ahorita todo es memes y despreocupación hasta que nos enteramos que algún ser querido o cercano está sufriendo o no sobrevivió a esta pandemia. Lamentablemente solo hasta que llegamos a ese punto le damos el valor que se merece a este problema mundial.
¿Quién hubiera pensado que una “soupe de chauve-souris” pondría en jaque al sistema capitalista – neoliberal imperante durante siglos? Sí Mafaldasiguiera viva a la mejor no hubiera odiado tanto a las sopas, no obstante ello, no fue Marx, ni Lenin, ni mucho menos “la Britney camarada roja” quién logrará esta hazaña impensable por los teóricos del socialismo o comunismo. Sin embargo, no solo está colapsando el sistema económico mundial sino también los gobiernos populistas, es decir, esta crisis generalizada está poniendo al descubierto la ineptitud de los gobiernos populistas de izquierda o de derecha para enfrentar una contingencia sanitaria de proporciones bíblicas, pues ahora su demagogia y retórica con base en poses en redes sociales no les sirve para gobernar eficientemente y tener soluciones inteligentes para enfrentar al coronavirus.
Para cualquier mandatario o mandataria el estar al frente de una nación en esta situación es sin dudarlopor un momento una tarea sumamente difícil, porque en sus manos tienen el destino de cientos de miles o hasta millones de compatriotas que podrían morir por causa suya; ¿cómo poder dormir con la conciencia tranquila después de saber que tu tibieza o respuesta tardía ante una situación no le costó la vida a tus paisanos? La curva de contagios sigue creciendo y no tiene fecha para bajar, no podemos esperar a que el gobierno actué con contundencia y congruencia como se espera que pase, ya sé que AMLO está más preocupado por el baseball, su carta de Doña Chapo y por pasear, que por ser el Presidente que México necesita en estos momentos sombríos, la ciudadaníadebe de poner el ejemplo de lo que se debe de hacer en tiempos tempestuosos, nos hemos levantado de terremotos, guerras, crisis económicas, huracanes, sequías, tormentas y hasta del “chupacabras”… hoy no será la excepción, pero, necesitamos de todas y todos para lograrlo, así que de favor, si es que tu circunstancia social o económica te lo permite por favor no salgas de casa.
Hay muchas cosas por hacer además de salvaguardarnos en nuestro hogar, no podemos estar juntos pero si unidos. Como comunidad hay diversas tareas que emprender en favor de las y los que no se pueden dar el lujo de estar en casa, en primera instancia dejar de juzgarlos y empezarlos a apoyar, no sabemos que tanto dure el encierro pero prefiero eso a tener que ver por transmisión en vivo de Facebook el entierro de un amigo o familiar; Manos a la obra, espero mañana esta sea una pesadilla de la que despertemos todos con la mayor rapidez posible, que nos permita abrazarnos y querernos más y que no tengamos que sufrir otra pandemia para volver a valorar lo verdaderamente importante de esta vida.
¡Nos leemos pronto!
