Durante el Congreso Estatal Extraordinario del PT en el Estado de México, se presentó el Manifiesto de las Mujeres Petistas como hoja de ruta para una transformación real.
Toluca, Estado de México, 13 de abril de 2025.– En un mensaje contundente, Angélica Rivadeneyra Villarreal, lideresa estatal del Partido del Trabajo (PT), hizo un llamado enérgico a erradicar todas las formas de violencia, desigualdad y opresión que enfrentan las mujeres, durante su intervención en el Congreso Estatal Extraordinario del partido celebrado en Toluca.
Rivadeneyra subrayó que, pese a los avances democráticos, las mujeres continúan enfrentando formas renovadas de discriminación. “Las mujeres de izquierda sostenemos que esta igualdad aún no se ha materializado. Hoy enfrentamos nuevas formas de reproducción y aceptación de la discriminación, y no podemos permanecer en silencio”, expresó.
Desde una postura crítica y profundamente ideológica, la petista afirmó que negar el machismo y el patriarcado no los elimina. “Las sociedades siguen divididas entre el mundo que habitan los hombres y aquel que les fue impuesto a las mujeres. Todas hemos vivido algún tipo de violencia. Por ello, este Congreso no puede ser un acto protocolario, sino un espacio de reflexión, denuncia y compromiso”, enfatizó.
Durante el evento, se presentó oficialmente el Manifiesto de las Mujeres Petistas, un documento que recoge las voces, luchas y demandas de miles de mujeres desde el corazón ideológico del PT. “Está escrito desde nuestro ombligo ideológico, desde el dolor de las víctimas de feminicidio, desde la rabia, pero también desde la esperanza de transformación”, declaró.
Rivadeneyra exigió acciones concretas: “Demandamos legislaciones firmes, instituciones sensibles y políticas públicas eficaces. Urge acabar con el sistema capitalista y patriarcal que pisotea nuestros cuerpos. La revolución no será posible sin feminismo de izquierda”.
La lideresa estatal instó al PT a no ser indiferente, a alzar la voz y a construir un marco jurídico que garantice los derechos de las mujeres como derechos humanos reales, y no solo simbólicos. “La categoría de feminicidio no debe ser una estadística más, sino un grito de justicia y dignidad”, dijo.
Finalmente, celebró que la asamblea de delegadas y delegados haya aprobado la incorporación del Manifiesto a los principios del partido. “Que no sea una declaración simbólica, sino una hoja de ruta política para transformar la vida de las mujeres, especialmente de las más vulnerables. Porque otra sociedad sí es posible, y las mujeres petistas estamos listas para dar esta batalla”, concluyó.
